Demanda

Decisiones que provocan mareas. Los irregulares nombramientos del Cortijo.

Hace unos días los medios de comunicación informaron de que Jesús Candel (Spiriman) había presentado una denuncia penal contra altos cargos del SAS y Consejería por prevaricación continuada y nombramientos ilegales.

Categorias: Actualidad Andalucía, Legislación, Opinión SMA, Política y Gestión Sanitaria
Colectivos:

Desde hace años el Sindicato Médico Andaluz viene luchando en todos los frentes contra lo que consideramos un procedimiento tendencioso de selección de cargos intermedios y contra unas unidades de gestión clínica (UGC) no reguladas en la norma legal. Siempre hemos batallado contra lo que consideramos una política basada en el nepotismo, la soberbia y la arbitrariedad, en todos los campos en los que nuestra organización está legitimada. 

Son muchos los artículos que hemos publicado (alguno de los cuales se citan en la demanda mencionada), se cuentan por decenas las demandas interpuestas contra estos procedimientos selectivos y contra estas unidades de gestión clínica y es constante en las mesas de negociación nuestra exigencia de transparencia en los procesos selectivos y nuestra tajante oposición a la creación de UGCs sin soporte legal. Es decir, nuestra lucha se ha plasmado durante los últimos años en estos tres frentes: mediático, jurídico y de negociación sindical. Con respecto a esta última, no debemos olvidar la importancia de la mesa sectorial de negociación (único espacio en el que legalmente han de dirimirse las discrepancias entre la administración y la parte social).

Hasta ahora no hemos tenido el éxito que nos hubiera gustado a pesar de que hemos conseguido parar nombramientos basados flagrantemente en el amiguismo y a pesar de que muchas sentencias judiciales hayan considerado nulas las actuaciones del SAS. Y decimos que no hemos tenido el éxito deseado porque, aunque hayamos ganado decenas de demandas, el SAS ha buscado las trampas necesarias para no cumplir las sentencias y seguir adelante con sus planteamientos por encima (o rodeando) de la opinión de la Judicatura. 

Nuestra postura siempre ha sido firme, a pesar de que a veces provoca incomprensión en algunos de nuestros compañeros que optaban a estos puestos. Seguiremos luchando en la mesa sectorial, que es nuestro ámbito propio de negociación, y extendiendo nuestras reivindicaciones a medios de comunicación y juzgados. En este sentido, celebramos que otros compañeros y ciudadanos, a título individual o a través de asociaciones, se animen a usar cada vez más estas dos últimas opciones (medios y juzgados) en defensa de la sanidad y del colectivo médico. 

El papel de la sociedad civil en las reivindicaciones sociales ha sido de extraordinaria importancia para provocar un cambio de actitud en la administración, y nos cargan de argumentos a los que legítimamente representamos a los profesionales de la salud en los órganos oficiales de negociación.

Nuestra organización espera que gracias a iniciativas como ésta (o acualquier otra que surja) la administración cese en su actitud y modifique su política de nombramientos, así como su talante autoritario en sus relaciones con los médicos y sus representantes.

En definitiva, el SAS tiene dos opciones, o se sienta de verdad a negociar con nosotros en el ámbito de negociación regulado por las leyes de nuestra comunidad o se empeña en seguir tomando decisiones unilaterales e injustificadas que alienten el nacimiento de mareas ciudadanas que finalmente obliguen a dimisiones, vueltas atrás y daños colaterales innecesarios.

¿O hace falta que recordemos lo ocurrido con las fusiones hospitalarias?

Comité Ejecutivo SMA