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Fichar en sanidad es un sistema muy rígido, con pocos beneficios.

Los médicos opinan que el registro de horas que afecta al personal laboral y los Médicos Internos Residentes (MIR) de la sanidad pública y también a la sanidad privada es un sistema «poco pensado, rígido, difícil de implantar y con pocos beneficios».

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Este domingo entraba en vigor la normativa de fichar en el trabajo que afecta al personal laboral y los Médicos Internos Residentes de la sanidad pública. Sin embargo, «los hospitales no han introducido ningún sistema para controlar la jornada laboral», ha señalado Tomás Toranzo, presidente de CESM, para quien esta norma «está muy poco pensada, es rígida, difícil de implantar y reporta pocos beneficios«.
Según explica Toranzo a Redacción Médica, «la única repercusión de esta medida será que se garanticen las libranzas por guardias», para lo que «existen otras medidas más eficientes para la gestión de personal», ya que esta norma «lo único que introduce es rigidez y complicación«.
También incide en que actualmente «el horario se estaba cumpliendo en los hospitales sin ningún problema, obedeciendo también a la normativa europea de los descansos y las horas extra por las que ya se está pagando«. Toranzo destaca que «uno de los objetivos de esta medida es hacer caja, pero no lo va a conseguir».
En esta línea, ha insistido en que no es necesaria la introducción  de mecanismos de control horario «porque son rigidices y no aporta nada». De momento, y a pesar de que la norma entró en vigor el 12 de mayo, en los hospitales públicos no se ha implantado ningún sistema ya que, como señala el presidente de CESM: «Ningún centro se ha puesto en contacto con los representantes de personal para informar sobre este tema».

En la privada

También el colectivo de médicos de la sanidad privada rechazó la implantación de esta norma calificándola como «absurda». Según señaló Manuel Carmona, vocal de Medicina Privada de la Organización Médica Colegial «es una propuesta a destiempo» y poco apropiada para la profesión médica.
Coincide con Toranzo en señalar en la dificultad de su implantación ya que para un médico es difícil «de base» fichar. Para Carmano «no es lógico fichar en la privada donde, un alto porcentaje, trabaja por consulta o servicio«. 

Fuente: Redacción Médica